jueves, 17 de enero de 2008

Y ahora ¿qué?


Se acabó. Alonso deja McLaren y termina así con una etapa que podría haber sido gloriosa y que terminó siendo una travesía por el desierto. Para el asturiano se acabó el sufrimiento de sentirse relegado a un segundo puesto, de que su trabajo no se apreciase adecuadamente, de que todas las flores fueran siempre para otro.

Ahora que el de Oviedo deja la casa de Ron Dennis, el mercado empezará a moverse. No hay asientos libres que den garantías de luchar por el podio (Ferrari y BMW ya tienen confirmados a sus pilotos y no parece posible un cambio en ninguno de los dos casos) y optar a los puntos puede resultar bastante frustrante para un bicampeón del mundo.

Así las cosas, Alonso se encuentra en la encrucijada de tomarse un año sabático y esperar conseguir un coche puntero en 2009 (algo de lo que no tiene ninguna garantía en absoluto) o pasarse a una escudería "de segunda". Últimamente han sonado Williams, Toyota, Red Bull e incluso Renault, pero no hay nada confirmado.

Por historia y prestigio en caso de devolverlo a lo más alto, Williams sería una opción más que interesante, pero sus últimos resultados, tanto deportivos como económicos, no presagian nada bueno. Toyota tiene mucho dinero y un equipo más que decente, pero su rígida estructura basada en los principios japoneses más tradicionales, además de su excesiva dependencia de la central nipona, hacen la vida muy difícil dentro de la escudería. Por su parte, Red Bull tiene un futuro bastante brillante por delante y un presupuesto relativamente alto que podría incrementarse en caso de que Alonso recalase en el equipo austriaco; sin embargo parece que david Coulthard y mark webber ya tienen asegurados los asientos para la temporada que viene.

Lo de Renault es otra historia. Después de una existosa relación antes de irse a McLaren y de mantenerla en los peores momentos del asturiano en el equipo de Woking, parecería la escudería idónea para Alonso. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce y las rencillas internas, junto con un proyecto aparenetemente en retroceso no parecen el mejor caldo de cultivo para un viaje común en el que se juegan el todo por el todo.

Si yo tuviese que apostar por algún destino lo haría por Toyota y su presupuesto prácticamente ilimitado, aunque me gustaría volver a ver a Alonso en Renault

No hay comentarios: